En una de nuestras extravagantes escapadas de la historia el día de hoy, fuimos a parar con la idea de los imaginarios sociales. Esas construcciones colectivas de conocimiento que forman prejuicios inconscientes en las sociedades. El día de hoy lo exploramos en torno al nazismo, pero eso lo abordaremos en otra nota.
Sin embargo, para mostrar lo poderoso de este fenómeno opté por citar un conocido y popular videojuego. No se trata de la primera ocasión que lo cito, ya que casi toda referencia GRIEGA cae en él por ser una interpretación bastante agresiva de la mitología griega.
El juego en cuestión se llama God of War, y literalmente, se trata sobre un muchacho enojado que busca matar a cuanta persona se le ponga delante, no importa si civil inocente, engendro del demonio, dios de la paz, dios de la guerra o amante escueta. Todos, absolutamente todos terminan probando el filo de sus armas (un mensaje por demás educativo).
Les dejo unos trailers para que aquellos que no lo conocen se familiaricen con este gritón personaje (Advertencia: MUCHA VIOLENCIA, MUCHA!):
Ahora bien, quizá el dato más interesante de todo este asunto es que los desarrolladores prestaron muchísimo detalle a los mitos griegos para la elaboración de este violento videojuego (¿mencioné que era violento?), sin embargo, debeiron realizar una gran cocesión en la tercera entrega y no fue porque desconocieran la inforamción real, sino más bien por un problema sobre el imaginario colectivo social en torno a esta particular leyenda griega.
Se trata de Hércules, el famoso hijo de Zeuz a quién se le encomiendan numerosas tareas para probar su destreza y ganarse así un lugar en el Olimpo.
¿El problema? El nombre Hércules no es griego, sino Romano. El nombre que los griegos dieron a este personaje es Heráclito, quién además de las tareas se manda un par de macanas importantes en la mitología griega. En cambio, la versión Romana, Hércules, cumple con todas las tareas y consigue finalmente el lugar en el Olimpo...
¿El problema? El nombre Hércules no es griego, sino Romano. El nombre que los griegos dieron a este personaje es Heráclito, quién además de las tareas se manda un par de macanas importantes en la mitología griega. En cambio, la versión Romana, Hércules, cumple con todas las tareas y consigue finalmente el lugar en el Olimpo...
No quiero arruinarle el juego a nadie... peeeeero, adivinen con quién se cruza (y posteriormente mata) nuestro gritón personaje???
Pista:
Como verán algunos imaginarios sociales son muy difíciles de superar, aún cuando la verdad sea totalmente distinta de lo que se cree o entiende como cierto. En este práctico ejemplo, ocurre con un personaje de un videojuego...
Pronto, estará subidos los post sobre los efectos 3D (no me olvidé) y un pequeño post sobre el nazimo.
Nos vemos en clase y no olviden de mirar el post de la bibliografía para el trabajo!
Saludos
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